jueves, 16 de octubre de 2014

Ansiedad

Hice un descubrimiento respecto a mi persona. Negativo, pero estoy a tiempo.
Me di cuenta que soy una persona en extremo ansiosa. Caí en la cuenta, también, que la maternidad me exacerbó esa lindísima cualidad. Y la maternidad misma es la que me hizo darme cuenta, porque se ve que antes, o lo tenía más controlado o me afectaba menos o lo usaba de alguna manera en la que no me afectaba negativamente. 
Lo que me pasa es que me empieza a agarrar un acelere interno. Y es algo que tiene que ser ya-ya-ya-ya-ya-ya-ya-ya. Antes de empezar lo que sea que quiera, empiezo a pensar, por ejemplo, en que voy a tardar demasiado tiempo, que cuando termine ya no va a servir, que mi idea va a caducar, que de la forma que lo voy a hacer quizá no sirve, que los beneficios no son tales, que bla-bla-bla-bla...
Me auto boicoteo. Es horrible, pero decía, estoy a tiempo. Me da bronca pensar que perdí mucho tiempo en el que podría, por ejemplo, haberme capacitado, aprendido cosas nuevas. Eso me pone mal. El tiempo lo perdí, se fue, pero desde que llegó #ebm los tiempos cambiaron también y siento que tengo una nueva oportunidad. 
Releía los post con la etiqueta ansiedad. Me gustó volver a leerlos. Me encuentro en cada post. Me encuentro ahí y en otro lugar. La ansiedad de la espera es una cosa. La ansiedad del reacomodamiento es otra completamente diferente. La ansiedad de nuevas decisiones, de no saber que sigue tambien.  
Me veo más organizada, más ansiosa, menos ansiosa, menos organizada. Con nuevas ansiedades.  Pero me veo y me parece importante no perderse o volverse a encontrar. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...